Crear sin permiso: un acto necesario

Crear desde la libertad suena fácil, pero no siempre lo es.
Hay una presión constante por “hacerlo bien”, por encajar en la idea que alguien más tiene del arte:
lo que los críticos aplauden, lo que las galerías quieren, lo que el algoritmo premia.

Pero hay algo que no debemos olvidar:
el arte no pide permiso.

Crear para gustar es una trampa

Cuando empiezas a crear pensando en qué tan bien va a caer, cuánto va a gustar o si va a vender, algo se rompe.
No porque esté mal vender o tener éxito, sino porque tu punto de partida ya no es tu voz, sino la expectativa de alguien más.

Y en ese proceso, muchos artistas se pierden:

  • Dejan de explorar cosas que los emocionan.

  • Se censuran.

  • Se repiten porque “eso funciona”.

  • Se alejan de lo que realmente quieren decir.

Entonces, ¿cómo se ve crear desde la libertad?

No es “hacer lo que quieras” sin pensar.
Es reconocer que tu trabajo no necesita la validación de nadie para existir.
Es seguir creando aunque no tengas likes, aunque no te llamen de ninguna galería, aunque nadie entienda lo que estás haciendo… todavía.

Es soltar la necesidad de encajar, y sostener lo que haces, incluso cuando incomoda, incluso cuando no vende, incluso cuando es raro.

El arte que vale es el que se sostiene solo

〰️

El arte que vale es el que se sostiene solo 〰️

Las obras más potentes no nacieron de briefings, tendencias ni métricas.
Nacieron de artistas que no pidieron permiso para sentir, para mostrar, para fallar, para romper algo.
Y eso es justo lo que hace falta más hoy: creadorxs que no estén esperando que alguien más les diga “sí, así sí”.

En ArtBank creemos en eso

Creemos en el arte que no está buscando encajar, sino decir algo. En lxs artistas que se atreven a hacer cosas sin filtro, sin molde, sin permiso. Porque muchas veces, lo que más necesitamos ver, es justo eso que nadie se atreve a mostrar.

Si estás creando algo y no sabes si “va a gustar”,hazlo de todos modos. Exprésalo como te sale.
Y recuerda: si tu arte necesita pedir permiso para existir, probablemente no estás siendo tú.

Anterior
Anterior

Wplace: la Ciudad de México en píxeles colectivos

Siguiente
Siguiente

Cuando la moda habla en mexicano: H&M x Lorena Saravia